De repente, un día te das cuenta. Te das cuenta de que ya no pensas tanto en el, que ya no lo buscas mas. Te das cuenta de que ya no esta y que no esperas que vuelva, porque sabes que es imposible y que de alguna forma, ya esta. Comenzas a sentirte mal contigo misma. Ahi, solo te queda recordar las cosas buenas, olvidar las malas, y seguir adelante. El tema no esta en olvidar, sino en aceptar la ausencia del otro, el vacio que deja alguien cuando se va, y aceptar que ya no puede seguir ocupando el lugar que antes tenía. Vendrán varios que entrarán en tu vida y ocuparán ese lugar y aunque sientas que no es lo mismo, que nadie lo va a igualar, dejalos intentar. No te cierres. No creas que es reemplazar, es aprender a continuar. El recuerdo de esa persona, por mas de que alguien nuevo ocupe su lugar y juegue su rol nunca nadie te lo va a quitar. Es lo único que te queda y una de las cosas que mas valorás.
domingo, 17 de agosto de 2008
Seguir adelante
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