Duele verte con una mina que le faltan las ideas y le sobran argumentos. Duele verte anestesiado porque así se dio la cosa, porque así quiso tu suerte. Mientras yo caliento el banco de suplentes con la camiseta puesta para incluirme en tu futuro. Mientras yo te doy de día lo que ella no cumple en las noches. Aquí esta tu clandestino para jugar al escondite como amante guerrillera. Para cubrir de tus carencias de ternura y desenfrenos. Y es que tu ahora tienes dos y a mi me dividen uno. Cierra puertas y ventas que el mismísimo cielo pondrá una sucursal, en el séptimo piso, a las 11.50 mientras duren los besos y permita el reloj. Cierra puertas y ventas que en 90 min habrá que compensar las caricias que caben en los huecos que dejas, los encuentros furtivos y la soledad. Y es que tu ahora tienes dos y a mi me dividen uno. Puede ser que tu conciencia te castigue por las noches y te aliente en las mañanas. Puede ser que un día de tantos nos quedemos sin futuro y tu sigas con tu teatro. Mientras tanto dame un beso atrincherado de esos que por ser culpable son como agua en el desierto. Tómame como al tequila, de un golpe y sin pensarlo, que si alguien sale ganando eres tu querido amigo aunque pienses lo contrario. Y es que tu ahora tienes dos, y a mi me dividen uno.
domingo, 19 de octubre de 2008
Duele verte con una mina que le faltan las ideas y le sobran argumentos. Duele verte anestesiado porque así se dio la cosa, porque así quiso tu suerte. Mientras yo caliento el banco de suplentes con la camiseta puesta para incluirme en tu futuro. Mientras yo te doy de día lo que ella no cumple en las noches. Aquí esta tu clandestino para jugar al escondite como amante guerrillera. Para cubrir de tus carencias de ternura y desenfrenos. Y es que tu ahora tienes dos y a mi me dividen uno. Cierra puertas y ventas que el mismísimo cielo pondrá una sucursal, en el séptimo piso, a las 11.50 mientras duren los besos y permita el reloj. Cierra puertas y ventas que en 90 min habrá que compensar las caricias que caben en los huecos que dejas, los encuentros furtivos y la soledad. Y es que tu ahora tienes dos y a mi me dividen uno. Puede ser que tu conciencia te castigue por las noches y te aliente en las mañanas. Puede ser que un día de tantos nos quedemos sin futuro y tu sigas con tu teatro. Mientras tanto dame un beso atrincherado de esos que por ser culpable son como agua en el desierto. Tómame como al tequila, de un golpe y sin pensarlo, que si alguien sale ganando eres tu querido amigo aunque pienses lo contrario. Y es que tu ahora tienes dos, y a mi me dividen uno.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario